29 de Septiembre San Miguel Arcángel
Yo Soy El Ángel De La Hueste de San Miguel. Yo soy un ángel de la Hueste Divina del Regente del Amor, del encargado de la evolución del Planeta Tierra y del Arcángel San miguel que defiendo con su luz el Bien, la Bondad y los hijos de Dios. Es el Arcángel Sublime, El Guerrero Celestial. Su espada empuña con valor y decisión, porque es ardua su labor y dura su misión. Acabar con el mal dominando al invasor… y hoy, que pronto todos serán llamados a responder por la forma en que han conducido sus vidas, es mayor l trabajo que debe realizar, pues todo se acelera… No hay tiempo que perder, el enemigo avanza, el mal se quiere imponer. Esta es la razón por la cual, con mi fulgor angelical y como soldado de este Ejercito Celestial llegó en esta misión oficial y con esta petición especial: Lucha con los soldados de la verdad, combate junto al guerrero del amor. Sé un canal para usar su escudo de luz y su espada azul, para acabar con las asechanzas del pérfido traidor. Confía en los ángeles. Forma parte de este Ejército Celestial, ofrece tu vida para combatir el mal. Lucha por el planeta, por la justicia, por la Fe y el Amor. Has hoy un compromiso con Dios y con nuestro Defensor. Los ángeles te necesitamos… porque te amamos.
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28 de Septiembre San Wenceslao
Yo Soy El Ángel De La Superación. En el pensamiento de Dios, todo el universo está en un tiempo presente de amor. Él sabe que Su Esencia llegará a manifestarse porque ese es Su Plan Original. Los instantes que vive tu mundo son solo una situación pasajera que no trasciende dentro de la eternidad. Por eso, los ángeles que ponemos nuestro empeño en llevar al planeta a vivir el glorioso presente de Dios, derramamos continuamente sustancias benditas para activar su proceso de evolución. Y la luz de mi esencia, mi vibración angelical, resuena en la Creación activando el éter para construir un mundo mejor. Hoy llego hasta ti para acariciar tu vida y llenarte de anhelos de superación. Ven a mis brazos… ven a envolverte con mi luz… cierra los ojos…. Y aspira mi naturaleza celestial. Mi fulgor dignifica y eleva tu espíritu hacia Dios y te conduce hacia metas nobles donde lograras felicidad. Porque tú eres feliz en el presente de Dios. Aspira a hacer de tu vida un tiempo eterno de amor. Solo será así cuando también des amor. Ahora, quédate con migo y alégrate, tienes motivos para sonreír… porque el día que te aguarda lo pensó Nuestro Padre hace mucho, sólo para ti. 27 de Septiembre San Vicente De Paul
Yo Soy El Ángel Pureza De San Gabriel Vuelve tus ojos divinos hacia el cielo azul y observa las blancas formaciones de nubes… Aspira profundamente, aspira tranquilamente y aspira con amor. Ven… vena a mis brazos y descansa en mi corazón. A través de las claras formas celestiales se vislumbra una hueste poderosa. La niebla tornasolada, con visos de nácar anuncia un acontecimiento especial y… ¡oh! Dos Heraldos avanzan con su trompeta se detienen y, solemnes, piden atención. La Pureza, la Bondad, la Entrega, el Amor… pronto deben llegar y quedarse en el corazón de los hijos de Dios… y hace su aparición: ¡el Arcángel San Gabriel! Su blancura es infinita, límpida su túnica, sin mácula terrenal… ¡Es Tan Bello!... ¡tan hermoso! ¡Es imponente su resplandor!... ¡Arrójate a sus brazos!... Apóyate en su pureza y recibe su emanación celestial. Habla con él y pídele paz, benevolencia, tolerancia, comprensión y compasión, virtudes muy necesarias en estos momentos de transición. Ofrécele tu amor, tu lealtad y tu participación para colaborar en su labor de limpieza y purificación… Él te acerca suavemente a tu pecho y con ternura te besa la frente. Es una señal de aceptación. Ahora… vuelve aquí y mantén tu sonrisa de satisfacción por que la ocasión lo merece. Toda la corte celestial te da la bendición. 26 de Septiembre San Cosme y San Damián
Yo Soy El Ángel Portador de la Pradera El bosque se cubre con mi manto de luz. Las hadas se inspiran, bailan, se mueven con el viento y las sílfides llegan y se unen al grupo… y todas danzan, esparcen rocío y cristalinas gotas que adornan mi aura. Ahora giran de forma distinta, desprenden polvo de oro y todo brilla con más fulgor. ¡Ya está listo! El paisaje es bello y es para ti… porque para esto he llegado, para ofrecerte este lugar especial. Ven a mis brazos… quiero presentarte a las ondinas, a las ninfas que juegan con burbujas de amor y también a las salamandras que tejen filigranas con hilos de sol. Trabajan todas con pureza con la belleza etérea de la naturaleza… pues son seres que viven aquí y esperan gozosos para darte su amor. Cuando quieras estar a solas… llenarte de nuevas energías… piensa en mí. Yo estaré contigo, aquí en esta pradera, apoyándote en mi pecho, te daré nuevos bríos y bendiciones de Dios. Ahora, no te apartes de mí lado. Recibe mi beso de ángel en tu frente y comparte conmigo el regalo que hoy recibirás. 25 de Septiembre Nuestra Señora de la Merced
Yo Soy El Ángel Portador de Respuestas Divinas. Llego en respuesta a tu petición reciente, cuando evocaste a Nuestro Padre pidiendo ayuda. He sido enviado por Él para ofrecerte mi apoyo, mi guía y mi protección. Ven… ven a mis brazos, pues soy portador de bendiciones de amor. Cierra tus ojos y observa esta imagen singular. Un espacio precioso, iluminado… ángeles afanosos transportan esferas de luz y cada vez aparecen más ángeles en la escena, pues más esferas de luz hay que trasladar. Son esferas de tamaños variados, luminosas, con colores mágicos: nacarados, azules, rosas, dorados, y la música que escuchas… ¿no es celestial?... el aroma de perfumes, todo es maravilloso. Las esferas contienen bendiciones para tu mundo y son fruto de la luz de la oración. Porque orar con fervor, con entrega y con devoción, nos da esa sustancia para producir los <<milagros>> que corresponden a cada petición. Hoy llego a tu vida con este fardo de amor. Dentro encontrarás lo que requieres para ti y también tendrás para regalar. Para el día de hoy hay un gran regalo especial. Por eso te pido que no te apartes de mí lado. Yo te conduciré. Ven… apóyate en mí. 24 de Septiembre Nuestra Señora de la Merced
Yo Soy El Ángel de las Mercedes. Viajo por los cielos con el fulgor de la esperanza… y hoy me detengo en tu mundo para cubrirte con mi luz y llevarte a realizar tus sueños. Mi resplandor es de fe, de piedad, de certeza y de confianza en la misericordia divina. Ven… ven a mis brazos angelicales que te aguardan tiernamente. Sumérgete en mi fragancia de paz y percibe la inconmensurable luz que aparece ante la divina visión, la dulce, majestuosa y límpida presencia de Nuestra Madre Divina, Nuestra Señora de la Merced con el Niño en sus brazos dando Su bendición… El blancor de su presencia disminuye tu percepción… te sumerges más dentro de esta experiencia celestial… y escuchas la melodía de su dulce voz: “Hijo mío, llego a ti en este día para llenarte de mí luz, con presentes, dones y bendiciones. Sólo quiero que los recibas con tu corazón puro, limpio y sin rencor. Vengo a ayudarte, a perdonar a los que sientes que te han ofendido y a buscar el amor de aquellos a los que tú has ofendido. También vengo, hijo mío, para que ofrezcas una oración por el ben de la humanidad. Acércate a mí y te enseñaré a perdonar, a mantener la pureza y la piedad, a lograr tranquilidad en tu vida y dicha en tu corazón. Porque te amo con toda la profundidad de mi naturaleza virginal”. Ahora, sigue en mis brazos. Iremos a conquistar este día que te sonríe… con miradas de ternura y de amor… mucho amor. 23 de Septiembre San Lino
Yo Soy El Ángel de la Fiesta. Fulgores Divinos, luces celestiales, vibrantes sonidos y aromas de gloria con rayos dorados se impregnan en tu vida y alumbran tu mundo con amor. Asciende… asciende. Deja que te transporte mi fulgor. Cariño, las luces son fuertes, son bellas, porque están destinadas a llevarte a un mundo ideal… al mundo supremo donde esperan los ángeles que, felices, desean que estés tú allí. ¡Cómo brillan! Tonalidades de azul tornasolado, blanquísimas alas… ¡que bella escena! Esperan… felices… hay fiesta ya estás dentro de esa visión. Cariño… siempre te esperamos y queremos tenerte entre nosotros… queremos que entres en esta luz de amor. No tardes… coge mi mano… siéntate en mi regaso… cierra tus ojos y percibe esta esencia celestial. Disfruta por un instante del amor supremo que traigo como encargo para ti hoy. Ahora, feliz y tranquilo, quédate a mi lado. Hay maravillas… vivencias sin igual que esperan para que tu, sonriente, las puedas disfrutar. 22 de Septiembre San Mauricio
Yo Soy El Ángel que Llega en el Otoño. Hoy desciendo con bendiciones de amor para ti. Acércate… ven… reposa en mi pecho… deja que te cubra con mi luz sagrada y con mis rayos de amor. Cierra tus ojos físicos y observa con tus ojos espirituales. Aspira profunda, lentamente… tranquilamente… y visualiza. Hay ángeles gloriosos a tu alrededor. Celebran algo… dan gracias al Creador. ¡Equinoccio de otoño!... equilibrio celestial… las mieses de siegan, se juntan los granos, hay que completar la cosecha… porque se acerca el invierno… el atardecer. Cuando el sol está a punto de ocultar su brillo, comulga con los Ángeles Vespertinos y Alaba a Dios, por su Creación. Cariño mío, las notas sublimes de la Creación están en mi aura iluminando el cielo con rayos dorados que se filtran a través de las nubes en formación, mágicas, que sostienen en lo alto una vasija celestial, el granero divino para almacenar tus obras de amor. Cariño mío, en mi resplandor vespertino por encima de toda contaminación terrenal, está la gloria esperando tu acceso. Son Bendiciones, son regalos supremos que esperan que tú las vayas a reclamar con obras buenas, intenciones puras y amor sin interés. Al concluir el Día al atardecer de tu vida… en el otoño. Ven… ven a mí y te conduciré a mi resplandor. Ama a Dios en las Alturas y prepárate para recibir Su Bendición. Se optimista… hay triunfos para ti. Yo te mantendré en mis brazos mientras disfrutas del éxito que comienza hoy en tu vida. 21 de Septiembre San Mateo
Yo Soy El Ángel del Sol. La caricia de mi aura da calor a la tierra y fuego a tu corazón. Porque somos los ángeles quienes transportamos los rayos divinos que dan vida a la Creación. Transportamos su esencia, la energía que ha salido del seno de Dios. Ven a mis brazos, siéntate en mi regazo, apóyate en mí, aspira profundamente y cierra tus ojos. Ahora ascendamos hacia el astro rey, llameante, majestuoso y esplendoroso. Hay ángeles dorados que portan ánforas con un líquido radiante que vierten sobre la Obra de Dios… dando vida… salud, esperanza y repartiendo Su gran Amor. Asi obra cada día… porque no hay un solo instante en que sea olvidada la humanidad por Dios. Da gracias por el sol porque es la fuente… es la imagen de Su bondad, de Su Calor. Es el símbolo de lo visible de Su Vida. Porque allí ha depositado Él la esencia que nutre Su Creación. La Custodia es Su Imagen, que aguarda el Amor, el Amor que es Dios, que se nos da como Manjar Celestial. Sigue en mis brazos, quiero que dependas de mí, quiero alimentar tu alma cada minuto de hoy y llevarte a gozar de este día que ha sido preparado sólo para ti. 20 de Septiembre San Agapito
Yo Soy El Ángel Celestial. El mundo de los ángeles, es un mundo de amor, de paz, de tranquilidad y de belleza sin igual. Es un mundo lleno de armonía celestial y desde este lugar de esplendor mágico he atravesado los espacios infinitos para llegar hasta ti, para coronarte con mi halo divino, para atraerte a mis brazos de amor y cubrirte con fulgores de ternura angelical. Ven… ven querido mío. Cierra tus ojos y llénate de mi esencia divina. Visualiza mis rayos y ascendemos a través de las esferas radiantes… entra en mi espacio de luz y disfruta de esta visión de amor. Hay gozo, alegría, felicidad total, música de arpas, perfumes y nubes mágicas de colores indescriptibles… ¡Pureza excelsa! Y muchos ángeles, cada uno con una bendición para ti. Entra y recíbelas… absorberlas. Ahora comienza todo con amor, y comparte un poco. Yo te llevaré a recibir este día de magia y dejaré mi amor en tu alma, que como eco resonará siempre en tu corazón, recordándote cuanto te amo. |
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